miércoles, 10 de marzo de 2010

Una elección que pondrá aprueba a los chiapanecos

Enrique Alfaro / Columna Rumando

ES POSIBLE que el proceso electoral local 2010, no tenga parangón en nuestro país, pues en poco más de cuatro meses los chiapanecos renovaremos el poder legislativo y la totalidad de gobiernos municipales, con una elección considerablemente acortada, más propia de países desarrollados donde la cultura democrática es una realidad.
Quienes demandamos desde hace tiempo que las campañas fuera menos atosigantes, por largas y onerosas, hoy nos enfrentamos a una elección donde los partidos gastarán menos, tendrán menos candidatos y las precampañas y las campañas se verificarán en menos tiempo.
Por su parte los ciudadanos padecerán menos la propaganda partidista, para que finalmente los electores puedan elegir, entre menos candidatos hombres, la integración los 118 gobiernos municipales y el congreso local. De ese tamaño es la diferencia con los procesos anteriores, locales y federales.
Esto hace necesario advertir que nos enfrentamos una elección novedosa, distinta, donde la presencia de candidaturas de mujeres será notablemente mayor, lo que probablemente estimulará campañas con acento de género y se pondrá a prueba el “machismo” del electorado y la solidaridad de quienes forman la mayor parte del listado nominal: las féminas con credencial para votar.
En este proceso los electores chiapanecos tendremos otra ventaja: debido al número de coaliciones electorales que integraron los partidos, el total de candidatos será menor y sólo el Partido del Trabajo contenderá con candidatos propios, sin alianzas.
Corresponde a la sociedad chiapaneca, a los votantes chiapanecos, asumir una actitud ante estas novedades que yo juzgo positivas. Restablecido el derecho a elegir a nuestras autoridades, es necesario demostrar que es una responsabilidad que sabemos y sabremos ejercer a plenitud participando en el desarrollo del proceso y, particularmente, en la jornada electoral del domingo 4 de julio.